................De piruetas y otras vanalidades.................!
Los reggueton party
Leí con asco, sorpresa, nauseas y unas terribles ganas de tener una erupción fecal, que ahora niñitos desde los siete a los quince años de edad, salen a “rumbiar” a diversos lugares de la ciudad. Lo hacen más o menos de 2 a 7 de la noche. Pero lo que realmente me sorprendió es que estos eventos se llaman los “reggueton party”.
¿Cómo es posible? Abandonan los juegos y la inocencia por irse a bailar, pero ¿Por qué reggueton? ¡Nuestra infancia ahora escucha este infame ritmo de ñeros y putas, casi tan frenético y vulgar como este bloq!
Una de las principales preocupaciones de los padres y otras organizaciones sociales en pro de la infancia, es el evidente interés de nuestros niños en temas y “música” con un claro mensaje sexual y erótico.
La inquietud es totalmente valida. Poco importa que a muchas de las niñas que asisten a estas fiestas, todavía no les haya emplumado la golondrina y que probablemente sus jóvenes acompañantes, hasta ahora empiezan a comprender que detrás de una paja, hay algo mas que un terrible dolor articular en la muñeca.
Otro punto importante, según los dueños de los establecimientos, radica en el hecho de que los infantes (porque no son otra cosa) que asisten a estas parranditas, solo consumen gaseosas bebidas energizantes y colombinas.
Lo anterior puede ser cierto, pero no se me haría nada raro que muchos de estos niños mañosos y con mal gusto musical, se estén introduciendo tampones llenos de licor en cuanto orificio encuentran de la cintura para abajo. Esas actitudes, no hacen mas que servir como campo de cultivo para futuros travestís y locas que mas tarde marcharan por la séptima, exigiendo el derecho a ser reconocidos como humanos. No estoy exagerando, son casos y mañas que ya se han visto y comentado en nuestra ciudad.
Yo no tengo nada en contra de que los niños rumbeen, eso no es un pecado. Además estoy seguro que con una organización cuidadosa y decente, estarían protegidos de las drogas y los pedofilos que las venden. Lo que no puedo tolerar es que nuestra infancia se este enamorando de la música y letras casi coprofilicas del reggueton. Sus influencias y la plantación de basura mental, encontraran un terreno 100% fértil en los niños. En un futuro ya no tendremos rockeros, metaleros, salseros, rumberos a la antigua, bohemios, músicos clásicos o baladistas y mucho menos podremos tener gente decente capaz de pensar por el país, críticos, columnistas, investigadores, artistas, etc.
A cambio, abundaran los raperos regguetoneros, mal vestidos y tremendamente mal hablados, cambiando los tampones llenos de licor por grandes jeringas llenas de heroína, en el caso de los que tengan plata. Mientras tanto, los pobres estarán raspando los ladrillos de la ciudad, buscando la manera de seguir perreando y jalando en un nivel extremo.
El legado que esta sembrando el reggueton no es el de una rumba la chimba. Esa porquería es simplemente el ultimo escalón que nos hacia falta para poder destruir a nuestra niñez, en medio de un país que adicionalmente les ofrece violencia e ignorancia, además de un incomprensible gusto por las novelas estúpidas y los chismes de gente irrisoria.
Si alguno conoce a algún chiquillo con estas tendencias, por favor hable con el, edúquelo. Si persiste, casquele y azótelo, hágale entender que existen otras formas mas dignas de arruinarse la vida si eso es lo que quiere. En caso de no convencerlos, llámenos. Nuestro equipo anti regguetonero le dará una lección de vida que nunca olvidara y le hará perder el gusto por tan asquerosa música.
¿Cómo es posible? Abandonan los juegos y la inocencia por irse a bailar, pero ¿Por qué reggueton? ¡Nuestra infancia ahora escucha este infame ritmo de ñeros y putas, casi tan frenético y vulgar como este bloq!
Una de las principales preocupaciones de los padres y otras organizaciones sociales en pro de la infancia, es el evidente interés de nuestros niños en temas y “música” con un claro mensaje sexual y erótico.
La inquietud es totalmente valida. Poco importa que a muchas de las niñas que asisten a estas fiestas, todavía no les haya emplumado la golondrina y que probablemente sus jóvenes acompañantes, hasta ahora empiezan a comprender que detrás de una paja, hay algo mas que un terrible dolor articular en la muñeca.
Otro punto importante, según los dueños de los establecimientos, radica en el hecho de que los infantes (porque no son otra cosa) que asisten a estas parranditas, solo consumen gaseosas bebidas energizantes y colombinas.
Lo anterior puede ser cierto, pero no se me haría nada raro que muchos de estos niños mañosos y con mal gusto musical, se estén introduciendo tampones llenos de licor en cuanto orificio encuentran de la cintura para abajo. Esas actitudes, no hacen mas que servir como campo de cultivo para futuros travestís y locas que mas tarde marcharan por la séptima, exigiendo el derecho a ser reconocidos como humanos. No estoy exagerando, son casos y mañas que ya se han visto y comentado en nuestra ciudad.
Yo no tengo nada en contra de que los niños rumbeen, eso no es un pecado. Además estoy seguro que con una organización cuidadosa y decente, estarían protegidos de las drogas y los pedofilos que las venden. Lo que no puedo tolerar es que nuestra infancia se este enamorando de la música y letras casi coprofilicas del reggueton. Sus influencias y la plantación de basura mental, encontraran un terreno 100% fértil en los niños. En un futuro ya no tendremos rockeros, metaleros, salseros, rumberos a la antigua, bohemios, músicos clásicos o baladistas y mucho menos podremos tener gente decente capaz de pensar por el país, críticos, columnistas, investigadores, artistas, etc.
A cambio, abundaran los raperos regguetoneros, mal vestidos y tremendamente mal hablados, cambiando los tampones llenos de licor por grandes jeringas llenas de heroína, en el caso de los que tengan plata. Mientras tanto, los pobres estarán raspando los ladrillos de la ciudad, buscando la manera de seguir perreando y jalando en un nivel extremo.
El legado que esta sembrando el reggueton no es el de una rumba la chimba. Esa porquería es simplemente el ultimo escalón que nos hacia falta para poder destruir a nuestra niñez, en medio de un país que adicionalmente les ofrece violencia e ignorancia, además de un incomprensible gusto por las novelas estúpidas y los chismes de gente irrisoria.
Si alguno conoce a algún chiquillo con estas tendencias, por favor hable con el, edúquelo. Si persiste, casquele y azótelo, hágale entender que existen otras formas mas dignas de arruinarse la vida si eso es lo que quiere. En caso de no convencerlos, llámenos. Nuestro equipo anti regguetonero le dará una lección de vida que nunca olvidara y le hará perder el gusto por tan asquerosa música.
Apóyenos, el reggueton es como la malaria o el cáncer, la guerrilla o los paras. Es como la corrupción o la clase política de nuestro país. El futuro esta en juego.
2 comentarios:
Hoy nos encontramos en una situacion caotica donde no sabemos que atacar mas si el reggueton o padres e hijos...es increible que las influencias de estas dos cuestiones hayan dado un vuelco total en nuestras mentes y gustos tanto televisivos como musicales, por un lado la hirba mala de daniela franco (nunca muere) y por el otro el papito (dady) yankee (o como se escriba, igual son una basura)regguetonero hijo de puta sin educacion al parecer todo lo que dicen sus canciones es lo que le hacian a su mamà el caso es que se ha llegado a tal punto donde no se quien tendra mas reputacion si las amigas de la 13a o el elenco de padres e hijos, si el cantautor del kirriquiqui o dady yankee, el caso es que abran muy bien los ojos niños de esta sociedad porque uds son el futuro de este mundo y con esas influencias de hoy dia, en un futuro no muy lejano terminaran comiendo arequipe del dedo chiquito o meñique y con la pierna cruzsda
el final del mundo se acerca, tornados y huracanes, terremotes y avalanchas, todos nosotros los humildes parroquianos caeremos y el mundo quedara a dispocision de Daniela Franco y todos los los que salen ne Padres e hijos. bailaran champeta sobre nuestras fosas y luego se trabaran al ritmo de reguetton pateando lo poco que quede de nosotros
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